Hubo risas, canciones, buenos cuentos y mucha, mucha complicidad.
Cuando el público escucha de esta manera y responde como lo hizo el otro día en el Peni la mitad del espectáculo está hecho... resulta todo mucho más fácil y mejor; el oficio de contar cuentos se convierte en un auténtico placer.
Gracias a todas y a todos por venir, por estar y por respirar conmigo.
SOLO SÉ QUE EXISTO PORQUE LO ESTOY CONTANDO.
GRACIAS POR BRINDARME LA OCASIÓN DE HACERLO
... y de propina unas maravillosas fotos echas por mis amigos Leo y Alex | . |
No hay comentarios:
Publicar un comentario